La entidad bancaria con presencia en España, Italia, Reino Unido, Chile, Dubai, Luxemburgo y Suiza ofrece un interesante análisis de las dinámicas que caracterizan la gestión de las inversiones en los mercados italiano y español
La industria italiana y española del ahorro está viviendo un ciclo positivo al menos desde hace tres años, a pesar de la crisis, las tasas al mínimo, los spreads variables y las incertidumbres políticas. Probablemente algunas de estas características señalan dos mercados donde la concentración de riqueza ha aumentado, y por tanto muchas dificultades permanecen.
A nivel macroeconómico (fuente datos Bloomberg), la imagen que tenemos hasta hoy es de dos países que buscan volver a crecer, y que parten de situaciones complejas y no símiles precisamente. Italia tiene un crecimiento que muestra números muy tímidos, en el primer trimestre de 2015 el crecimiento del PIB se certifica sobre un 0,3% sobre base trimestral. El mercado del trabajo ofrece tímidas señales de reactivación, dato que en el otoño pasado la tasa de desempleo era del 13,2%,mientras que hoy estamos en el 12,9%. Aumenta la confianza entre consumidores y productores, y esto parece fundamental. El gran problema sigue siendo el débito. En realidad el Estado italiano puede controlar el déficit anual del balance por debajo del 3%, como ha mostrado desde hace años, pero con una crecimiento casi nulo, por lo que este déficit se financia en todo caso con nuevo débito, que permanece en su máximo con un 132% del PIB.
España está acelerando mucho su crecimiento, que alcanzará un +1% sobre base trimestral. Pero la deflación permanece fuerte y constante, el IPC es negativo desde hace casi un año, -0.6% en abril de 2015. También aquí el desempleo desciende, pero permanece aún peligrosamente cerca del 24%. El indicador de confianza publicado por la Unión Europea sigue en aumento. España debe afrontar un gasto corriente todavía demasiado elevado, el déficit es del 5,8%; quizás a nivel gobernativo esta es la variable más desestabilizante.
A nivel industrial, hemos efectuado un estudio sobre las masas intermediadas de la plataforma para ver el crecimiento y los movimientos del mercado.
En Allfunds Bank, en abril de 2014, las masas intermediadas de Italia y España eran alrededor de 93 mil millones de euros, en abril de 2015 eran 148 mil millones de euros, con un incremento interanual de un 59%. El crecimiento más fuerte en términos absolutos ha sucedido en Italia con +28 mil millones en un año, alrededor del 50%, pero en términos relativos España ha visto un incremento excepcional de las masas del 72%. Hoy en día Italia intermedia el 42% de las masas de toda la plataforma, España cerca del 32%. Por tanto, en seguida tomaremos en consideración una muestra de cerca de 15 millones de euros, correspondientes a las masas intermediadas en los dos mercados, italiano y español.
El primer análisis muestra la composición de los dos mercados en abril de 2014.
El mercado italiano es tradicionalmente un mercado de obligaciones, hasta hoy el 40% está invertido en productos de obligaciones, el 76%, más de tres cuartos, está invertido en productos accionarios o de obligaciones. El mercado español se presenta más diferenciado. Ambos mercados han experimentado en un año una duplicación de las inversiones en productos mixtos. Los inversores españoles, que utilizan la plataforma, utilizan mayormente también las inversiones alternativas, en términos relativos y absolutos, a perjuicio de los productos de obligaciones y a diferencia de los inversores. En ambos mercados, la concentración en productos de obligaciones era más elevada, lo que demuestra que las tasas cercanas al cero han empujado en busca de nuevas oportunidades.
Aplicando al universo estudiado una categorización interna del departamento de Investment Services, informamos de aquellas que son las principales diferencias o similitudes a nivel de asset class. Cabe destacar que en el último año la media ha sido de un aumento en todas las asset class a parte de algunas excepciones como en Italia los productos de obligaciones a media o corta duración y las utilities y en España real estate, convertibles, high yield y telecom.
Se ha producido un fuertísimo aumento en ambos mercados de las inversiones en productos alternativos Global Macro, en los productos de obligación con larga duración, a rentas garantizado y productos mixtos asset conservativos. Esto demuestra que se ha producido una búsqueda de diversificación; los inversores además han buscado mejores perfiles riesgo/rentas a largo plazo o productos mixtos que generalmente tienen hasta el 80% de obligaciones. El mercado italiano ha permanecido más estable, mientras los inversores españoles, han reducido muchas inversiones de obligación a favor de perfiles mixtos agresivos y flexibles así como de algunos productos sectoriales, como los industriales y sanitarios.
A finales de abril, la situación puede ser representada con el siguiente gráfico.
Se puede deducir, de este gráfico, la mayor propensión de los inversores españoles hacia productos alternativos y mixtos, mientras los italianos permanecen más expuestos a productos de obligaciones, excepto por los de corta duración, y accionarios. Las asset class han sido tomadas, como recordado, de nuestras clasificaciones.
Haciendo una subdivisión similar, podemos observar la diferencia geográfica de las inversiones que muestra al inversor italiano más diferenciado y expuesto particularmente a los mercados emergentes.
El inversor español prefiere inversiones en categorías como Eurozone, USA y global.
El inversor italiano está medianamente más expuesto a los países emergentes y a los países europeos incluso los que no pertenecen a la eurozona. La exposición de los inversores italianos a países de la eurozona, USA y Global alcanza el 62.84% (86,26% si incluimos también el resto de Europa); el español en los mismos mercados invierte el 71,57% (93,3% si incluimos al resto de Europa), un 9 % más.
La próxima parte del análisis descompone las masas invertidas a través de la plataforma por tipología de cliente, como la sociedad de gestión, private bank, insurance company, etc. La descomposición puede ser examinada bajo varios aspectos; hemos ejecutado tres: una descomposición por área geográfica, por asset type y por asset class.